jueves, 8 de noviembre de 2018

EXTRACTO DE ALGO QUE DE ESCRIBÍ CUANDO INICIABA ESTE GOBIERNO. "LOS CAMINOS DEL SEÑOR SON INSONDABLES"

EL GOBIERNO DE "UNIDAD NACIONAL"
ó de cómo acorralar a los empleados públicos.
Franco Benavides

El Gobierno de “Unidad Nacional” anunciado por el Presidente Alvarado, realmente es el del “Consenso Neoliberal”. La principales fuerzas políticas y económicas lograron que en la primera y segunda ronda de las recién pasadas elecciones el espectro político se moviera hacia la Derecha. Pasamos de un Gobierno del PAC que oponía alguna resistencia a la agenda para desmantelar el Aparato Estatal a uno, que según sus primeras señalas, adoptó las principales tesis neoliberales.
Desde la campaña, los candidatos que pasaron a la Segunda Ronda dieron su apoyo al Proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas. Y no decimos que aumentar los impuestos indirectos sea propio de la “agenda neoliberal” pero, en cambio, si lo es el convertir en ley la “austeridad fiscal” por medio de la Regla Fiscal; esto sí que es encarnar el principio neoliberal de “Menos Estado, más Mercado”.
Sí, todos los indicios apuntan a una derechización del PAC y su “Gobierno de Unidad”. Empezando porque muchos de quienes destacan en el Gabinete son reconocidos simpatizantes y hasta fanáticos de las recetas que procuran desmantelar el Estado Social y convertir los servicios y bienes públicos en simples mercancías.
Sin duda, después de años, incluso décadas de señalar a los empleados públicos como una especie de casta privilegiada y parasitaria, por la gracia de sus organizaciones sindicales; sin duda, el enfilar las medidas para resolver el Déficit Fiscal contra este sector, será muy popular. Esta política de arremeter contra el único sector de trabajadores que se ha podido organizar sindicalmente, parece ser la estrategia escogida por el Gobierno del Consenso Neoliberal para ganar la simpatía de los sectores poderosos del país e, incluso, de amplias masas de personas trabajadoras del Sector Privado que por sus condiciones de precariedad laboral, miran con cierto rencor, las condiciones mucho más dignas del empleo público.
El Gobierno del Consenso Neoliberal, el que ha conformado el Presidente Alvarado, se apresta a romper el “empate” entre las fuerzas que defendían el Estado Social y las que impulsan la Contra-Reforma Neoliberal. Haciéndose el ciego sobre el verdadero origen de los problemas estructurales del país, entre los que sin duda, el Déficit Fiscal, es un resultado y no la causa; con una miopía histórica oportunista, este Gobierno -tal vez arrastrado por las fuerzas políticas y económicas que han logrado ese “consenso” (“el gasto estatal es malo”); parece dispuesto a hacer avanzar lo que los Gobiernos Liberacionistas apenas se atrevieron a insinuar: desbaratar a la Clase Media compuesta en gran medida por empleados públicos y con ellos al único Movimiento Social que ha hecho resistencia al desmantelamiento de las Instituciones del Estado Social: los Sindicatos del Sector Público.

4 de junio de 2018.

viernes, 12 de octubre de 2018

Bonito “análisis político” y digno de La Nación
Caricaturizar una protesta social

Franco Benavides Flores




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Sin duda uno de los acontecimientos políticos más importantes de las últimas décadas es este movimiento de protesta sindical y social que aún mantiene a miles de ciudadanos en las calles, especialmente -y en lo que parece ser su epílogo-, fuera del Valle Central. ¿Qué consecuencias ha tenido y tendrá una lucha que se ha prolongado por más de un mes y cuyos principales protagonistas, pero no únicos, son los sindicalistas del sector público? Es demasiado pronto para hacer el inventario de sus logros y sus fracasos, sobre todo porque las consecuencias de una huelga contra un proyecto de ley que impone impuestos y redefine los parámetros del gasto público, no es una huelga estrictamente laboral sino, como bien lo han dado a atender sus dirigentes, es una huelga política. Y las consecuencias políticas no se miden por el rebajo de salarios, ni por las clases o las consultas perdidas.

Por eso no me voy a atrever a hacer conclusiones sobre un hecho social que aún no está concluido y que sin duda no acaba de dejar sus huellas sobre la historia reciente de nuestro país. El Combo del ICE fue una gesta popular que se convirtió en un referente de la resistencia contra el desmantelamiento del Estado Social. Seguramente el “combo fiscal” será un referente en la lucha por la justicia tributaria.

Lo que no es admisible es que, un dizque “analista político”, convierta un importante acontecimiento político-popular en una especie de capricho individual. Eso hace el “analista” Víctor Ramírez en un artículo que titula “Paralizar un país”. Con una maña que no puede carecer de mala fe, “el científico social”, le atribuye a la persona de un solo sindicalista superpoderes carismáticos. Ese Gandhi Sindical, ese Luter King albino, arrastró a cientos de dirigentes sindicales y a miles de ciudadanos a la aventura de reeditar el “combo del ICE”.

Los que conocemos desde dentro el Movimiento Sindical sabemos lo lejos que está ese dirigente de ser siquiera el verdadero y principal protagonista, aunque así lo quiera presentar la prensa en una maniobra propia de la propaganda de guerra: hacer caricaturas del enemigo para vencerlo con las armas del prejuicio y del odio irracional. Que la prensa manipule a la opinión pública deformando la realidad, desgraciadamente ya lo esperábamos. Que un “científico social” recurra a la basura periodística para “analizar” uno de los más importantes acontecimientos sociales de las últimas décadas, deja mucho que desear. 

¡Viva la huelga! 

Heredia, 12 de octubre de 2018.


domingo, 9 de septiembre de 2018

Un hecho real interpretado libremente

Don Diputado visita el campo

Franco Benavides


La voz se corrió por todo el vecindario.  A las siete llega el Diputado.  

- ¿A dónde?
- ¿A la escuela?
- Y, ¿a qué viene?
- Pos, a apoyarlos por lo del desalojo. 
- ¿Y vos crees que haga algo?
- Pues claro... es Diputado.
- Yo no le tengo mucha fe a los políticos...
- Vos siempre tan desconfiada.

Un poquitín más tarde de la hora indicada -pues es de importantes hacerse esperar-, llegó Don Diputado.  Venía con  una comitiva compuesta por chofer, asistente y varios politiquillos del pueblo. Los importantes nunca andan solos.

Tras una breve presentación Don Diputado, como si tuviera siglos de convivir con la gente de ahí, tomó la palabra e interrogó a los vecinos: "¿Qué están dispuestos a hacer ustedes?".  Todos guardaron silencio porque la pregunta formulada así no más, ¡ni Keilor la agarraba!

- A ver señora, ¿usted se va a dejar desalojar?
- Pues no Don Diputado, vamos a pelear.

Toda el encuentro siguió en un tono paternal:  hora regañaba, hora se ponía cariñoso; luego parecía como que los quería acurrucar a todos como la gallina hace con sus pollitos, y en seguida se veía como que quería emprenderla a fajazo limpio.

- Vean, quiero saber sin me van a hacer caso, porque yo voy a poner la cara por ustedes.  Imagínense:  yo hablando por ustedes y ustedes me hacen quedar mal.  No, no. Yo también soy de campo y sé como es la gente de terca.

Cuando dijo "de campo", algunos hicieron un gesto de asombro y unos pocos no pudieron disimular una sonrisita.  Aquí conviene describir la facha de Don Diputado, para que se entienda:  el hombre era blanco como un mantel recién puesto a la mesa.  Su piel era, como dirían los poetas, aterciopelada y de nácar.  Era como si lo acabarán de sacar de un barril de cloro puro.  Y no es que entre los vecinos no hubiera gente blanca.  Hasta de ojos azules había alguno.  Solo que la piel de ellos estaba como averaguada por las inclemencias del clima y del trabajo. En cambio, la piel de aquel hombre parecía no haber recibido ni un rayo de sol en toda su vida. Y ni hablar de sus manos, eran tan blanquitas y lisas que la luz se reflejaba en ellas y encandilaba a uno u otro, según las bajaba o subía, las tiraba para un lado o para el otro, acompañando de esa manera su arenga, como si fuera director de orquesta.  De ahí que la alusión al origen campesino que hiciera aquel paliducho, causó entre los presentes, todos de campesinos de verdad, asombro y gracia. 

Don Diputado siguió dando instrucciones sacadas del basto conocimiento que, sobre la situación, había recién obtenido mientras tomaba un café con su comitiva.  

- Mañana mismo hay que pedir al ICE que instale una torre.  Vean, no tengo señal -dijo enseñando un fino celular de última generación.  Sin señal en los celulares no sirve el sistema de alarma temprana.

Alguien se atrevió a decir:

- Pero Don Diputado, hace como dos años le estamos pidiendo al ICE la torre y ahora que se ha declarado inhabitable esta zona... está difícil.  No sería mejor si le pedimos a la Comisión de Emergencias que nos de unos radios de esos portátiles.

- Por eso les digo:  yo voy a poner la cara por ustedes.  Quiero que mañana mismo hagan la petición y si es necesario yo mismo la firmo. Urge poner esa torre.

- Vuelvo dentro de un mes, dijo.  Miró a su asistente y este, rápidamente, revisó en su celular.

-Don Diputado, de hoy en un mes usted va para Medio Queso.  

- Bueno, que sea en veintidós días.  

- Ah, ese fin de semana si lo tiene libre.

- Pues bien, que sea de hoy en ventidós.  Pero no se olviden de todo lo que les he pedido.  Voy a venir a ver si hicieron la tarea, porque recuerden que yo voy a poner la cara por ustedes y no quiero que me hagan quedar mal.  La próxima semana tengo la reunión con el Ministro. ¿Entendido?

Así se levantó la reunión al final de la cual Don Diputado no dejó una mejilla femenina e infantil sin el estampado de sus finos labios.  A los hombres, a todos y cada uno, les ofreció un leve apretón de su suave mano.

Yo, que soy malicioso, me quedé pensando que si el Ministro, al ver esa jacha paliducha de la oposición, porque, hay que decirlo, el hombre es diputado de La Oposición; pensé si el Ministro no se emperraría más de lo emperrado que ya estaba.  ¿Acaso no va a creer que el asunto se politizó y que Don Diputado está procurando ganar votos para la próxima elección?

Pero yo mejor callado.  No les voy a dar el nombre de Don Diputado. No sea que éste se enoje y no quiera poner su jacha paliducha por la comunidad:  al fin y al cabo, esta gente está tan desesperada que se aguantan a cualquier cabrón... con tal de frenar el desalojo.

Heredia, 9 de setiembre de 2018.




miércoles, 15 de agosto de 2018

De cómo se atiende un problema de salud ocupacional en el MTSS




La curva de aprendizaje no debe ser igual para todos los temas

Franco Benavides 
A propósito de la forma en que se 
ha atendido o desatendido el problema
de salud ocupacional de los funcionarios
                de la Oficina de Inspección de Trabajo de Limón (*) 

Resultado de imagen para sudando en el trabajoYa se sabe que un nuevo gobierno no "nace aprendido". Hay eso que llama una "curva de aprendizaje". Solo que uno espera que la sensibilidad respecto al "tema propio", reduzca la pendiente inicial de esa curva.  Por ejemplo, que en el ICE la provisión de electricidad y banda de internet no sean un problema interno; que entre los  agentes de la OIJ el crimen sea mucho menor que para el promedio de la población; que en el INAMU el machismo esté erradicado; que en los Hospitales las epidemias estén controladas. 

En fin, que las nuevas autoridades públicas se pellizquen sobre lo que es el objeto de su autoridad.

Así uno esperaría que los conflictos laborales dentro del Ministerio de Trabajo, una vez que viene una nueva Administración, sean superados con ese compromiso que significa el ser la Autoridad encargada de tutelar los derechos laborales y armonizar e intermediar los conflictos a nivel nacional.

Esperamos que la "curva de aprendizaje" de la  nueva Administración del MTSS, respecto al cumplimiento los derechos y la solución de los conflictos laborales internos, sea coherente con la naturaleza de la función que le corresponde.

Heredia,  14 de agosto de 2018.

(*) Nota:  el Ministerio de Trabajo alquiló un edificio en Limón que no dispone de un sistema para acondicionar el ambiente (temperatura y ventilación), con mala iluminación y que no dispone de las instalaciones necesarias para conectarse a los servicios  telefónicos y de internet.  Es decir, el MTSS firmó un contrato de arrendamiento sin verificar que el inmueble cumpliera las condiciones de salud ocupacional que esta institución está obligada a tutelar para otros patronos.  

lunes, 4 de junio de 2018

¡Adiós al Diálogo Social!
ó de cómo acorralar a los empleados públicos.
Franco Benavides

El Gobierno de “Unidad Nacional” anunciado por el Presidente Alvarado, realmente es el del “Consenso Neoliberal”. La principales fuerzas políticas y económicas lograron que en la primera y segunda ronda de las recién pasadas elecciones el espectro político se moviera hacia la Derecha. Pasamos de un Gobierno del PAC que oponía alguna resistencia a la agenda para desmantelar el Aparato Estatal a uno, que según sus primeras señalas, adoptó las principales tesis neoliberales.
Desde la campaña, los candidatos que pasaron a la Segunda Ronda dieron su apoyo al Proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas. Y no decimos que aumentar los impuestos indirectos sea propio de la “agenda neoliberal” pero, en cambio, si lo es el convertir en ley la “austeridad fiscal” por medio de la Regla Fiscal; esto sí que es encarnar el principio neoliberal de “Menos Estado, más Mercado”.
Sí, todos los indicios apuntan a una derechización del PAC y su “Gobierno de Unidad”. Empezando porque muchos de quienes destacan en el Gabinete son reconocidos simpatizantes y hasta fanáticos de las recetas que procuran desmantelar el Estado Social y convertir los servicios y bienes públicos en simples mercancías.
Sin duda, después de años, incluso décadas de señalar a los empleados públicos como una especie de casta privilegiada y parasitaria, por la gracia de sus organizaciones sindicales; sin duda, el enfilar las medidas para resolver el Déficit Fiscal contra este sector, será muy popular. Esta política de arremeter contra el único sector de trabajadores que se ha podido organizar sindicalmente, parece ser la estrategia escogida por el Gobierno del Consenso Neoliberal para ganar la simpatía de los sectores poderosos del país e, incluso, de amplias masas de personas trabajadoras del Sector Privado que por sus condiciones de precariedad laboral, miran con cierto rencor, las condiciones mucho más dignas del empleo público.
El Gobierno del Consenso Neoliberal, el que ha conformado el Presidente Alvarado, se apresta a romper el “empate” entre las fuerzas que defendían el Estado Social y las que impulsan la Contra-Reforma Neoliberal. Haciéndose el ciego sobre el verdadero origen de los problemas estructurales del país, entre los que sin duda, el Déficit Fiscal, es un resultado y no la causa; con una miopía histórica oportunista, este Gobierno -tal vez arrastrado por las fuerzas políticas y económicas que han logrado ese “consenso” (“el gasto estatal es malo”); parece dispuesto a hacer avanzar lo que los Gobiernos Liberacionistas apenas se atrevieron a insinuar: desbaratar a la Clase Media compuesta en gran medida por empleados públicos y con ellos al único Movimiento Social que ha hecho resistencia al desmantelamiento de las Instituciones del Estado Social: los Sindicatos del Sector Público.
Inicia el Gobierno del Presidente Alvarado con la promulgación de una serie de medidas que golpean el salario real de los empleados del Gobierno Central: congelamiento de salarios, anualidades y disminución de otros componentes salariales como la Dedicación Exclusiva y la Carrera Administrativa (la primera, es cierto, tan solo para los empleados de nuevo ingreso).
Pero, ese inicio que de por sí golpea a un sector de los trabajadores costarricenses, se hace, además, de manera unilateral, por directrices gubernamentales que han invalidado no solo acuerdos que están vigentes entre el Gobierno y los Sindicatos, sino que han desconocido a la instancia de Diálogo Social creada para estudiar y negociar esas materias.
Las directrices promulgadas por el Gobierno del Presidente Alvarado, sin que el señor Steven Núñez, Ministro de Trabajo, siquiera se haya pronunciado sobre una materia que le compete, según el Decreto Ejecutivo No. 35730-MTSS y, menos convocado a la Comisión Negociadora de Salarios del Sector Público, sino para la negociación, al menos para la consulta previa sobre los cambios sustanciales en los reajustes de salarios y sus componentes;tales directrices le dicen adiós al Diálogo Social y acorralan a los empleados públicos y sus Sindicatos.
El Ministro de Trabajo, aceptó ese gesto simbólico de no asistir al principal foro mundial sobre los Derechos del Trabajo, suponemos como el primer gesto de la austeridad anunciada por el Gobierno. Pero bien, creemos nosotros, esa ausencia puede ser el símbolo de lo que serán los Derechos Laborales para este Gobierno.
Heredia, 4 de junio del 2018

viernes, 30 de marzo de 2018


 REIVINDICAR EL CRISTIANISMO.

Recién llego de la procesión de hoy viernes.  A pesar de que no soy creyente, siempre me han gustado estas expresiones culturales. Hace tiempo dejé de ser un ateo contendiente, para ser uno reposado.  La verdad es que desde hace muchísimos años no le presto atención a la religión, salvo porque entiendo la profunda influencia que tiene sobre el pensamiento y el actuar de la mayoría de la gente.  De vez en cuando leo la Biblia, especialmente el Génesis (me encantan las leyendas de Adán y Eva, del Diluvio, de la Torre de Babel) y los Evangelios.  El de Marcos y el Mateo me gustan mucho más que los de Lucas y Juan.  Los dos primeros son menos doctrinarios, más vivenciales, me parece.

En mi época de ateo beligerante, me había quedado con aquella famosa frase de Marx, “La religión es el opio de los pueblos”, sin leer con cuidado el contexto del que se extraía. Combatía la religión como si fuera la causa de los males y no una forma de hacerlos más soportables; un alivio, como lo es el opio para el dolor. Mi materialismo simplificado me hacía pensar en la religión como un fenómeno ajeno, agregado artificialmente a la realidad y que había que combatir al mismo nivel que la “explotación del hombre por el hombre”.  

Hoy que presencié la representación de la “pasión de Cristo”, observé a la gente realmente conmovida (hay que decir que usar personajes vivos en lugar de estatuas provoca más a los sentimientos que a la solemnidad).  La canción interpretada por una muchacha que hacía de Virgen María, fue dulce y triste.  Todos la escuchamos en profundo silencio.

Recordé en ese momento parte del texto que acompañaba la sentencia de Marx sobre la religión y logré entenderla mejor que antes. El párrafo completo es este:

“La miseria religiosa es a la vez la expresión de la miseria real y la protesta contra la miseria real. La religión es el suspiro de la criatura oprimida, el sentimiento de un mundo sin corazón, así como el espíritu de una situación sin alma. Es el opio del pueblo. Se necesita la abolición de la religión entendida como felicidad ilusoria del pueblo para que pueda darse su felicidad real.” (Crítica de la filosofía del derecho de Hegel)

Sin lugar a dudas el cristianismo está fuertemente enraizado en nuestro vida porque ha sido un factor muy importante en la construcción de la identidad cultural de Occidente.  Muchos principios de la era moderna derivan de las prácticas y las creencias de las iglesias cristianas. De manera que el cristianismo es mucho más que un “consuelo” (un sustituto de la felicidad real): es una parte esencial de nuestra forma de ser y pensar.

Otra cosa es que sectas religiosas que beben de la mercantilización de la sociedad más que de los principios cristianos quieran materializar su programa “teocrático”.  Otra cosa es que el fanatismo religioso se vista de partido político y quiera gobernar a una república como si fuera un Principado de Dios e imponer su el diezmo, espiritual y material, sobre todo una nación. Y todo esto con la desfachatada complicidad de quienes ven la oportunidad de lograr la “gobernabilidad” que no han alcanzado mediante sus propios Partidos.  Neoliberalismo-neopentecostal: esa es la receta.    

San Pablo de Heredia, 30 de marzo de 2018.